Viajar en crucero es una experiencia diferente y la mayoría de personas que han viajado a bordo de uno coinciden en algo: es una experiencia que engancha, que gusta, y que repiten, porque aunque hagas dos veces la misma ruta nunca va a ser el mismo viaje.

Así que hoy te proponemos que actives el modo crucero y que te prepares para vivir una aventura en alguna de las travesías que te traemos a continuación. Porque seas como seas tenemos el crucero perfecto para ti. ¿Te embarcas con nosotros?

Exótico

Si eres de los que les gusta viajar para descubrir nuevas culturas el crucero es una forma distinta y muy especial de hacerlo, y con todas las comodidades que te puedas imaginar. Y si además eres previsor, estás de suerte, porque ya puedes reservar un crucero por Japón para la próxima primavera.

Aprovecha, por ejemplo, las vacaciones de Semana Santa y escápate a conocer Japón de punta a punta, desde Tokio a Shinizu y desde Osaka a Hiroshima en un completo viaje en el que podrás descubrir la milenaria cultura y las tradiciones de este país, sin preocuparte de maletas o traslados.

Relajado

Si lo que buscas en un viaje es desconectar, relajarte y disfrutar de la tranquilidad de no hacer nada, los cruceros también son una opción perfecta para hacerlo. En un crucero te olvidas de hacer y deshacer maletas, es como si estuvieras a bordo de una gran casa flotante que te lleva a conocer lugares espectaculares mientras tu solo te preocupas de disfrutar.

Una travesía por el Caribe, visitando Cozumel, Roatán o Jamaica es una experiencia única, igual que pasar la Navidad navegando entre Curazao, Aruba y St. Lucia, por no hablar de navegar a bordo de un transatlántico conociendo las islas de la Polinesia francesa.

Clásico

Para los más clásicos a la hora de viajar también tenemos una propuesta. ¿Qué tal realizar una travesía transatlántica a bordo de un crucero de película como el Queen Mary? Un barco como aquellos de principios del siglo XX que llegaban a las costas de Estados Unidos y que tantas veces hemos visto en el cine, pero con todas las comodidades actuales.

Se trata de un crucero en el que lo importante no es tanto el paisaje o la ruta, sino disfrutar de una travesía de lujo a bordo de un buque histórico.

Fluvial

Un tipo de crucero que no podía faltar en esta lista es el crucero fluvial, ese que transcurre siguiendo el cauce de un río. Se trata de una forma diferente de conocer alguna de las principales ciudades a través de los ríos que las recorren como el Danubio, el Rin, el Sena o el Garona, mientras descubres Viena, Estrasburgo o Venecia.

Como puedes ver, hay cruceros para todo tipo de viajeros, solo tienes que encontrar el que más se adapte a ti. ¿Nos vemos a bordo?